A ver cómo le explico yo a mi corazón que no se tenía que enamorar. Y menos tan así, y menos tan de ti...
A ver cómo le explico yo a mi razón que ha perdido por completo el juicio y la cabeza, y el norte y el sur. Que ha perdido la maldita brújula.
A ver cómo te explico yo a ti que lo que quiero, lo que quiero contigo es perder los miedos.
A ver cómo te explico yo a ti, lo que te quiero.
Sobredosificarme de ti, que digo yo, que de algo tendré que morir, y si es en tu piel, me parecerá una muerte deliciosa.
A ver cómo les explico yo a mis padres que me he vuelto a matricular en el colegio. Sí, en el colegio. Si no recuerdo mal, es ahí donde te enseñan los conceptos básicos de la vida, y ahora que siento que estoy viviendo por primera vez, voy justo empezar de cero.
Llevo seis meses asistiendo a clases nocturnas. Ahora estudio a Bécquer. Las mates ya no son un problema desde que cuento con tus dedos para sumar vidas y el inglés lo practico más... estudiando una lengua que no es la mía.
A ver cómo les explico yo a mis padres que ahora en Conocimiento del Medio estudio tus relieves ( ¡y qué relieves!). Ahora en Geografía estudio las provincias de todos tus lunares y me los sé todos de memoria, empezando por el Norte y acabando por perderlo...
A ver cómo les explico que en Educación Física ...bueno digamos que recorro la pista sin necesidad de hacer un descanso, y aguanto más que nadie.
El profe dice que debería practicar deporte más a menudo, que podía llegar a donde quisiera. Y yo le digo que no se preocupe, que he encontrado un cuerpo donde practicar cada noche eso que algunos llaman...amor.
En religión me enseñan los valores que antes no comprendía. Ahora comprendo que en el cielo puedo ver el color de tus ojos, y quedarme a vivir en la nube que yo elija cada vez que miro el móvil y veo que me hablas.
Sí...el año que viene me matricularé de Física y Química. Estudiaremos la gravedad, que aunque dicen que tiene un valor de 9,8 yo no me lo creo. Yo creo que tiene las medidas de tus labios. En Química, vamos a estudiar las mezclas, y no veas las ganas que tengo de empezar. Cuando me acuno en tus brazos, saltan chispas, y ésa es la mejor reacción, que dudo que aparezca en ningún libro.
A ver cómo les explico yo a mis padres que no se preocupen, que acabaré la carrera. Que sólo quiero que entiendan, por qué me acuesto tan tarde cada noche...y es que son clases nocturnas...
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